miércoles, 27 de enero de 2010

Columna

La vieja columna gris
con acabados
que no son de este planeta.
La mancha que cubre la zona media de la columna.
Mancha roja, que a segunda vista dices: "...Sangre".
Sangre, pegada a la columna,
parece de años luz
tercia pero parca
en su color opaco pero bello.
Como el golpe estruendoso
recibido a la estructura de concreto.
Concreto fino y de vigorosos años que la mantienen firme,
aquellas épocas donde lo firme era lo escencial.
Lo escencial de ahora es el tiempo, firme como una columna,
pero frágil al golpe.

viernes, 15 de enero de 2010

Sin Título

Como un parque vacío en pleno invierno, árboles sin hojas.
La gente hablando de sus preocupaciones y palabras limitadas.
Las hojas caen de a pocos, a velocidad muy lenta, pero hipnotizante.
Si caminar a tu costado es placer etéreo, pues que continue.

De noche todo es mejor, incluso caminar.
Detesto este cubo con cuatro paredes blancas.
Sólo me queda ver los pétalos blancos de aquella flor,
meciéndose al ritmo insaciable del viento del Sur.

Me preguntaste qué es lo que siento al estar a tu costado.
Cómo puedo responder algo así?
El miedo de decirte algo erróneo produce un calor en mis pies.
Tú sí me conoces.
Hablamos por horas, todo va ganando un peso maravilloso.
Si esto acaba, pues acabará con una cruzada de miradas.
Luego veremos que nunca acabará.

De noche todo es mejor, incluso caminar.
Detesto este cubo con cuatro paredes blancas.
Sólo me queda ver los pétalos blancos de aquella flor,
meciéndose al ritmo insaciable del viento del Sur.

Aquel parque de las tierras norteñas, aquel país de las oportunidades.
Ése país es mi destino, tu compañía era lo que me faltaba.
Mi complemento perfecto, pues no pido nada más.
Qué me queda, sólo esperar años sentado bajo la cornisa vieja que trata de taparme.
Esperar algo que nunca llegó.

jueves, 14 de enero de 2010

Y esto es...

Qué hago?

Que alguien me de alguna señal, aunque sea algo mínimo, acepto lo que sea, ya sea una
palabra, o al menos una oración.

Algo que llene este vacío, no es poco, no es mucho, sólo es algo que necesita estar lleno.
Ni mucho ni poco. Aunque sea algo.

Efímero es la palabra, yo digo eso.
Tú qué dirías, si estuvieses aquí, no conmigo, pero como una conexión.

Qué hago?

El tiempo es corto, debería hacer muchas cosas. Nada está dicho, nada termina tan pronto.
Según muchos, todo termina por algo, algo pasa porque debió pasar.

Yo no sigo esa suposición, no quiero seguir al rebaño de grandes cuestiones mayoristas acerca
de los problemas que pasamos todos nosotros.

Déjame olvidar lo que pasó ayer y enforcarme en el mañana, que estos problemas no carcoman de lo poco que me queda de alma.

Y no creo en nada de lo que he escrito hasta ahora...

domingo, 10 de enero de 2010

Epidemia del saber

Que esta tormenta no termine, que esta tormenta anule mis sentidos.
Nada de esto tiene sentido, nisiquiera la gota de sudor corriendo por mi rostro.
¿Es mucho pedir algo de sufrimiento efímero en esta corta vida?
Eso no tiene sentido, tampoco la gota de sudor corriendo por mi cuello.
Prendí la pantalla y pude ver sangre brotando desde las profundidades de los valles interandinos
de mi patria aún con poco tiempo para su destrucción.
Espero ser perdonado, no por aquella entidad, o cierta fuerza que no pueda explicar.
Sólo sentía necesidad de escribir esto.
No tiene sentido, al igual que la lágrima que está corriendo por mi rostro.

Ansiedad

Ansiedad

Era de noche, ni frío ni ropa cubría mi cuerpo.
Lo raro era que algo invadía mi cuerpo, aura tibio
producido por la proximidad intimidante de nuestros cuerpos.
Escuché un sollozo, de culpa enigmática y cierta ternura,
dijiste lo que sentías en pleno apogeo de romanticismo involuntario.
Por hacerte la complicada, tú misma te hiciste la mierda, lo inexplicable y complicado.
No esperaste una respuesta mía y me quitaste el aura, ahora frío.
No terminaré este llamado poema hasta saber que mi ansiedad acabará
cuando sepa lo que en serio deseas saber de mí, dejar las cosas en claro.
Tú dices que ya terminó,
pues yo digo que ni siquiera pudo comenzar.